El alumnado con TDAH tiene unas necesidades específicas por lo que habrá que tenerlas en cuenta a la hora de planificar y llevar a cabo las clases. A continuación se exponen algunas ideas que nos podrán ayudar en nuestro objetivo:
Indicadores generales:
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Información/formación del profesorado: es fundamental que el profesorado conozca el trastorno del TDAH, sepa como afrontarlo y reciba información lo más precisa posible sobre las características de los alumnos/as diagnosticados que tiene.
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Colaboración con las familias: el trabajo educativo coordinado con las familias es siempre muy importante, pero en el caso de los alumnos/as con necesidades especiales es fundamental.
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Ratio de alumnos/as por aula: grupos más pequeños en el aula permiten una educación mucho más personalizada atendiendo a las diferentes características e intereses de nuestro alumnado.
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Otros recursos: profesores de apoyo, recursos audiovisuales en el aula, materiales educativos adaptados a la diversidad del alumnado...
Indicadores dentro del aula:
- Establecer una metodología participativa y dinámica en la que se cambie frecuentemente el ritmo de la clase: explicación, actividades individuales, correcciones, trabajo cooperativo...
- Instaurar ciertas rutinas en esta metodología para que los alumnos conozcan de antemano el desarrollo general de la clase.
- Dar tiempos específicos para cada una de las actividades y controlarlos para evitar en la medida de lo posible que el alumno/a se disperse.
- Dar instrucciones breves y claras en clase, y asegurarse de repetirlas de forma individual al alumnado con TDAH para comprobar que el alumno las ha entendido.
- Seleccionar bien los grupos de trabajo de forma que las diferentes características de los alumnos se compensen: hiperactividad- ritmo pausado, impulsividad- mayor reflexión, etc.
- Ubicar al alumno con TDAH en un entorno con pocas distracciones: lejos de puertas y ventanas, otros compañeros habladores, etc. Preferiblemente en primera fila y cerca del profesor/a para que así se pueda hacer un mejor seguimiento de sus actividades en clase.
- Estar pendiente de que el alumno/a con TDAH use la agenda para llevar un registro de las tareas, resultados de exámenes, fechas de entrega de trabajos, etc. Revisar dicha agenda para asegurarse de que las anotaciones se realizan de forma correcta.
- No olvidar la importancia del refuerzo positivo y hablar con el alumno/a en privado cuando se le quiera corregir un mal comportamiento o actitud.
- En cuanto a los exámenes: diseñar exámenes con preguntas cortas, enunciados claros, dejar más tiempo si fuera necesario, asegurarse de reconducir la atención del alumno hacia el examen cuando se le vea despistado, explicar personalmente las preguntas si éstas no le resultan claras.
